Se trata de un documento, elaborado por el equipo de la Fundación, con comentarios generales que privilegian los derechos ciudadanos, y aportes técnicos en seguridad informática, seguridad de la información y seguridad pública. Esta contribución enumera la necesidad de evidenciar marcos de ciberseguridad que atiendan los aspectos principales para el resguardo de la privacidad, la protección de datos y la seguridad de la información de las personas, las organizaciones y la Nación.
En el análisis del documento intervinieron investigadoras, investigadores y profesionales de la Informática, de las Ciencias de Datos y del Derecho, entre otros
El documento aborda otras dimensiones indispensables como el requerimiento de la creación de una institución técnica para el estudio, análisis e investigación de diferentes aspectos de ciberseguridad, y el asesoramiento a los poderes del Estado en planes de estudio, emisión de normativa y evaluaciones técnicas. Además, plantea la necesidad de profundizar en una visión preventiva de incidentes de ciberseguridad y reservar la colaboración con la investigación de delitos como un área más.
El equipo interdisciplinario de la Fundación considera prioritario mejorar los planes de formación y crear ámbitos de educación en todos los niveles, así como de investigación científica e innovación.
Analizamos la propuesta de la Segunda Estrategia Nacional de Ciberseguridad y realizamos nuestros comentarios para que la ciberseguridad pueda entenderse en aspectos de privacidad, y transformarse en una política de prevención de incidentes, centrada en las personas y apoyada en el fortalecimiento y la creación de capacidades. Entre las propuestas consideramos necesaria la creación de una Agencia Nacional que promueva la educación en todos los niveles, el desarrollo de buenas prácticas en seguridad de la información, herramientas de prevención y un abordaje multidisciplinar.
